ROSTRO DE CRISTO. PINTURA FLAMENCA

En la Capilla Real de Granada, se encuentra la colección de pintura flamenca y hoy traemos esta tabla con el busto de  Cristo obra de un seguidor de Dierick Bouts.

Curiosamente, hay muchas similitudes en las representaciones del busto de Cristo durante el siglo XV y la tradición cuenta la historia de una supuesta descripción del rostro de Cristo de un contemporáneo de Jesus. Se trataría del gobernador de Judea, uno de los miembros de la familia de los Lentulos a quien se le atribuye una carta enviada al Senado romano donde se recoge la descripción. Es una carta apócrifa ya que ningún gobernador romano se hubiese dirigido al Senado romano en esos términos:

Lentulus, Gobernador de los Jerosolimitanos al Senado de Roma y al Pueblo, saludos. En nuestros tiempos ha aparecido y existe todavía un hombre de gran virtud llamado Jesús Cristo y por las gentes Profeta de la verdad. Sus discípulos le apellidan Hijo de Dios, el cual resucita a los muertos y sana a los enfermos. Es de estatura alta, mas sin exceso; gallardo; su rostro venerable inspira amor y temor a los que le miran; sus cabellos son de color de avellana madura y lasos, o sea lisos, casi hasta las orejas, pero desde éstas un poco rizados, de color de cera virgen y muy resplandecientes desde los hombros lisos y sueltos partidos en medio de la cabeza, según la costumbre de los nazarenos. La frente es llana y muy serena, sin la menor arruga en la cara, agraciada por un agradable sonrosado. En su nariz y boca no hay imperfección alguna. Tiene la barba poblada, mas no larga, partida igualmente en medio, del mismo color que el cabello, sin vello alguno en lo demás del rostro. Su aspecto es sencillo y grave; los ojos garzos, o sean blancos y azules claros. Es terrible en el reprender, suave y amable en el amonestar, alegre con gravedad. Jamás se le ha visto reír; pero llorar sí. La conformación de su cuerpo es sumamente perfecta; sus brazos y manos son muy agradables a la vista. En su conversación es grave, y por último, es el más singular y modesto entre los hijos de los hombres.

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La realidad histórica es que este miembro de los Lentulos no coincidió temporalmente con la vida de Cristo por lo que dificilmente pudo conocerlo y describir su rostro.

Como curiosidad, se puede apreciar como el rostro esta compuesto con una serie de formas arquitectónicas muy utilizadas en el s.XIV, dentro de la mentalidad y el gusto gótico.Una moldura conopial, o un arco apuntado por ejemplo.

Así, podríamos afirmar que se ha construido un rostro con las formas «de moda» en ese siglo XV.

Estos detalles los contamos habitualmente durante nuestras visitas.




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